lunes, 25 de agosto de 2014

TARTA MICKEY MOUSE

Hace unos días fue el cumple de mi peque Luis. Este verano Mickey ha estado muy presente en nuestra casa, así que ha sido el elegido para la tarta. Es sencilla de preparar. no tiene ingredientes complicados, pero es entretenida de hacer. Estuve liada todo el día anterior, prácticamente, entre hornear los bizcochos, rellenarlos, la decoración,... Pero estoy muy contenta con el resultado. Solo tengo una pega: no pude hacer foto del corte como me hubiera gustado. La tarta voló completamente en pocos minutos!!!
Ingredientes:
-tres bizcochos redondos, uno más grande que los otros dos, que han de ser iguales
-agua, azúcar y moscatel Augusta Bílbilis (Bodegas Valdepablo) para hacer el almíbar
-mermelada de fresa
-crema de chocolate (nocilla, nutella, ...)
-chocolate negro postres (para la decoración de la cara: ojos, nariz,...)
Ganaché de chocolate:
-200 g chocolate negro postres
-200 g nata líquida
Ganaché blanco:
-100 chocolate blanco
-50 g mantequilla en pomada
-2 cucharadas soperas y media de mascarpone
-1 cucharada sopera de azúcar glass
Preparación:
Hacemos tres bizcochos. Yo he preparado esta receta porque siempre queda perfecto tanto para comer tal cual como para utilizarlo de base de tarta. La cantidad la multipliqué por tres. Repartí dos partes iguales para las orejas y el resto lo utilicé para la cara. Coloqué papel de hornear en la base de los moldes para que se despegaran con mayor facilidad. También se puede usar spray desmoldante.
Mientras se hornean los bizcochos, preparamos el almíbar para calarlos cuando estén fríos y cortados.
Yo las cantidades las pongo a ojo. En un cazo echo agua, azúcar y un buen chorro de moscatel. Lo dejo hervir y así el alcohol se evapora y ya no hay problema para que puedan tomarlo los niños. Lo coloco en un biberón y lo dejo enfriar. Llevo un tiempo utilizando el biberón para calar los bizcochos, me resulta muy fácil y puedo distribuir mejor la cantidad por igual en todas partes.





Una vez fríos los bizcochos, les quité la capa de arriba (que se había hecho un poco de barriguita) para dejarlos uniformes y los corté en tres partes iguales.
En la primera capa puse el almíbar y, a continuación, unté con crema de chocolate ablandada en el microondas unos segundos, para extenderla mejor.


Otra capa de bizcocho arriba, vuelta a calarlo y cubrir con mermelada de fresa.



Tercera capa, calar con almíbar y colocar la silueta de la cara. La recorté de una fotocopia sacada de internet y la pasé a papel de hornear.


Se prepara el ganaché de chocolate poniendo en un cazo a fuego lento el chocolate y la nata, hasta que se deshaga completamente. Dejamos enfriar un poco para que espese un poco y cubrimos la superficie con él (excepto la parte de la cara que dejaremos con el papel y retiraremos después), así como los laterales.
Retiramos el papel de la cara y rellenamos con el ganaché blanco que habremos preparado mezclando todos los ingredientes en un cazo a fuego lento. Dejar enfriar bastante antes de ponerlo en el bizcocho para que quede con mejor textura.


Por último, colocar el papel de horno recortado de la cara sobre la fotocopia, deshacer chocolate de postres y dibujar los detalles por encima. Meter en la nevera para enfriar. Luego los despegamos y los colocamos sobre la cara. La lengua se rellena con mermelada de fresa.
¡¡Terminada!! ¿Qué os parece? ¿Os animáis a preparar una? El resultado es genial y a los niños y los mayores les encantó.

lunes, 11 de agosto de 2014

GALLETAS ROJO Y NEGRO PARA VICEN

Vicen es mi amiga desde hace ya casi 20 años. Ella no cocina nada, pero le encanta ser mi "conejillo de indias" en cuanto a lo de probar nuevos platos se trata. También le gustan mucho las galletas que preparo, siempre que hago algún modelo nuevo le guardo, al menos, una de ellas.
El otro día fue su cumple y, entre otros detalles, le preparé estas galletas con su nombre. Eso sí, en rojo y negro que son sus colores preferidos.
¡¡Felicidades, Vicen!! Sé que te gustaron mucho.

martes, 5 de agosto de 2014

HUEVOS AL PLATO EN EL MICRO

No me puedo creer que no tenga puesta esta receta. ¡Con la de veces que la hago! Es de esas que, en un momento, te puedes sentar a la mesa cuando vienes de trabajar y no has preparado nada con antelación, por ejemplo. También estos días, que vienes de la playa o la piscina con poco tiempo. Los acompañas de una buena ensalada y ¡¡A comer!!
Los ingredientes pueden variar. De hecho, suelo ponerles lo que pille por la nevera, admiten muchas opciones.
Ingredientes:
-dos huevos por persona
-tomate frito casero
-sal
-jamón serrano
-espinacas
Preparación:
Cubrimos el fondo del recipiente con tomate frito. Cascamos los huevos encima y salamos un poco. Repartimos el resto de ingredientes.
Introducimos en el horno microondas, tapados, durante 3 minutos. (el mío tiene una potencia de 900w).
Servimos con pan y disfrutamos.





A nosotros nos gustan bien cuajados, pero eso va al gusto. Si os gustan menos, pues menos tiempo.
Lo del tiempo en el microondas es aproximado, cada uno es un mundo, depende de la potencia que tenga. Lo mejor, al principio, poner poco tiempo e ir subiéndolo hasta que queden a nuestro gusto. Yo ya le tengo pillado el punto y siempre me quedan así.
Os los recomiendo de verdad. Solucionan muchas comidas o cenas y están buenísimos.

viernes, 1 de agosto de 2014

MERLUZA EN SALSA CON CIGALITAS

Otra rica propuesta para cualquier día. La merluza tiene muchas formas de prepararse y la que hoy os presento es una más a tener en cuenta. Yo la he preparado con merluza congelada, de la que viene sin piel ni espinas, pero ni que decir tiene que con merluza fresca ganaría mucho.
Aproveché para prepararla por probar el vino para cocinar de MIRÓ.
Emilio Miró Salvat, S.A. fue fundada en la ciudad de Reus en 1957, por el padre del actual propietario Pere Miró. Perteneciente a la familia Miró desde sus orígenes elaboraba vinos aromatizados y vinos de licor, principalmente a granel hasta que en 1983 y aprovechando el cambio de legislación, la empresa se especializó en la fabricación de productos envasados potenciando así la marca MIRÓ, dedicada principalmente a la elaboración del tradicional Vermut de Reus de reconocido nombre en toda Europa, cuya formula tradicional se conserva intacta y con el más estricto secreto familiar manteniéndose después de más de medio siglo.
Actualmente la empresa produce una extensa y variada gama de estos productos, ya sea para el mercado nacional como para el internacional en sus exportaciones.

El vino para cocinar Miró es especial para cocinar, elaborado a partir de vino blanco de 14,5% vol., que ha sido macerado con una mezcla de hierbas de toda la rica variedad de flora del Montsant convertida en oro líquido para mejorar nuestros platos con sus exquisitas recetas culinarias. Es ideal para la cocción de sopas de pescados y vegetales, menestras, estofados, guisos de aves, carnes y pescados, a los que aportará ese toque especial a hierbas aromáticas. Con todo esto tuve claro que quedaría fantástico en mi receta.

 
 
Ingredientes:
-filetes de merluza
-cigalitas
-1 cebolla grande
-perejil
-2 dientes de ajo
-aceite de oliva
-sal
-agua
-harina
Preparación:
En una cacerola baja ponemos aceite. Pasamos la merluza, tras salarla, por harina. La freímos un poco por ambos lados y apartamos.


En el mismo aceite pochamos la cebolla picada y los ajos machacados en el mortero, hasta dorarla, con un poco de sal.
Rehogamos un poco de harina junto a la cebolla.
Añadimos un vaso de vino y otro de agua y dejamos evaporar el alcohol cociendo un poco. Ponemos el perejil.

 Incorporamos la pescadilla y las cigalitas. Tapamos para que hierva unos minutos todo junto.

 Destapamos y emplatamos.
 ¡¡Riquísima!!

Y, mientras se cocinaba, nada mejor que un vermut rojo. El VERMUT MIRÓ rojo sigue siendo el auténtico vermut de Reus. Su color rojo rubí con matices de color teja, sus inconfundibles aromas y sabor a base de hierbas aperitivas, estimula y refresca. Está elaborado con la perfecta combinación de hierbas aromáticas totalmente naturales, con una maceración marcada y elegante, ligeramente balsámico. Sutilmente dulce con un toque amargo, muy sedoso, de paso fácil, ligero y grato recuerdo final, siempre siguiendo la receta familiar mejor guardada a lo largo de los años, que le hace inimitable por su exquisito sabor único.
 
                                
                                  
A nosotros nos encanta con un buen chorro de sifón, unos hielos y limón.