Unos días antes me puse a practicar un poco, no fueran a salirme mal justo el día del cursillo... Preparé dos modelos de los que quería hacer y los de hoy fueron uno de ellos.
La receta la cogí de Objetivo cupcake perfecto, y es su receta 2.0 de vainilla infalible. Y vaya si lo es, sale seguro y sale buenísima.
Ingredientes para el bizcocho: (salen unos 12 cupcakes)
-115g de mantequilla sin sal
-220 g de azúcar blanco
-3 huevos M
-200 g de harina
-1 cucharadita y media de Royal
-120 ml de leche semidesnatada
-1 cucharadita de extracto de vainilla
Ingredientes para la buttercream:
-250 g mantequilla a temperatura ambiente
-350 g de azúcar glass
-1 cucharadita de vainilla
-2 o 3 cucharadas de leche semidesnatada
-chocolate en polvo valor
-bolitas de chocolate tricolor TRADISSIMO
Preparación:
Preparamos las cápsulas de papel dentro de moldes de silicona para evitar que se expandan y deformen. Ponemos el horno a precalentar a 180º.
Tamizamos la harina con la levadura. Batimos la mantequilla con el azúcar hasta que se integren y la
mezcla se aclare. Añadir los huevos uno a uno mientras batimos. Agregamos la mitad de la harina y batimos a velocidad baja hasta que se integre del todo. Incorporamos la leche con el extracto de vainilla y seguimos batiendo. Echamos la otra mitad de la harina y continuamos batiendo a velocidad baja hasta que la mezcla esté homogénea.
Repartimos la mezcla en las cápsulas sin llenarlas más de 2/3. Horneamos hasta que, al pinchar con un palillo, éste salga limpio. Dejamos enfriar en una rejilla.
Tamizamos el azúcar glass y lo colocamos en un bol junto con la mantequilla, el extracto de vainilla y la leche. Cubriendo el bol, batimos a velocidad baja un minuto. Después subimos la velocidad y batimos al menos otros 5 minutos a velocidad media-alta. La buttercream se volverá casi blanca y su textura pasará a ser muy cremosa. La dividí en dos partes y a uno de ellas le añadí unas cucharadas de chocolate en polvo valor, mientras seguía batiendo, hasta que adquirió el tono que quería. La puse en una manga pastelera con la famosa boquilla 1M.
Una vez decorados los bizcochos con la buttercream, les puse por encima las bolitas de choco tricolor, que le dieron un aspecto fantástico, además de un punto crujiente genial al comerlos. Quedaron monísimos y buenísimos.
La utilización de la otra mitad de la buttercream así como el resultado del taller os lo mostraré en entradas sucesivas, por lo que os puedo decir: CONTINUARÁ.......jajaja.